La violencia basada en género sigue siendo un obstáculo para las mujeres periodistas y las defensoras de derechos humanos a pesar de las recomendaciones internacionales que el Estado no atiende, según una consulta realizada por pasosdeanimalgrande.com
Bella Carrillo, del Colectivo de Mujeres Periodistas, explicó que la situación de las periodistas en los medios de comunicación también está marcada por la violencia común hacía ellas, los principales ataques son a la familia y a la dignidad, con una fuerte exposición de sus vidas privadas.
Según Carillo, las mujeres que ejercen el periodismo también tienen el riesgo de sufrir violencia sexual de empresarios o de sus compañeros de trabajo, vinculado al tema económico que maneja el medio y en ese aspecto el Estado, no garantiza la debida protección, seguridad, la garantía de la integridad personal.
La violencia a las periodistas no es la misma que las que se documentan en los casos de hombres. El hostigamiento, los salarios desiguales, favoritismo en los puestos de trabajo ejecutivos o de toma de decisión, debido a que no hay un ente que regule que se cumplan los derechos de las mujeres en medios de comunicación, agregó Carrillo.
También la defensora Elizabeth Medina, de Derechos Humanos sin Fronteras, DHFH, expresó que la situación para las mujeres es muy riesgosa, y que muchas veces es limitada desde otras que ejercen un puesto en las instituciones públicas.
Medina relató que este 14 de enero durante una protesta en el Ministerio Público, donde realizaba acompañamiento a personas que protestaban, sufrió amenazas por un policía, quien le repitió tres veces a otro oficial “tírale una bomba a esa, para que se ahogue”. La defensora acudió al jefe a cargo del grupo de agentes para hablar con él y le respondió que no se preocupara que solo era una amenaza.
La defensora describió a pasosdeanimalgrande.com que se sintió indignada de la forma en que actúa la Policía Nacional, por lo que acudió al Mecanismo de Protección, pero no recibió el apoyo que esperaba ya que le solicitaron que les brinde toda la información a la que ella no tuvo acceso.
Medina, expresó que “si así son con una persona que se acredita como defensora, cómo serán con la población en general que llega a manifestarse y sufren incidentes, cómo voy a interponer la denuncia ante los mismos agresores?”.
En el Examen periódico Universal, EPU, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU recomendó a Honduras reforzar las acciones tendientes a eliminar aquellos patrones culturales que discriminan a la mujer, promoviendo un acceso adecuado a la protección judicial para evitar que casos de violencia que afectan su vida, salud e integridad queden en la impunidad.
Prevenir y sancionar todas las formas de violencia contra las mujeres para consolidar una mayor representación femenina en los puestos directivos y de adopción de decisiones, así como responder eficazmente a todas las formas de violencia contra la mujer, entre otras cosas impartiendo capacitación sobre cuestiones de género a las fuerzas del orden.