Los obstáculos en el acceso a la información, los despidos, suspensiones y reducciones de salarios aduciendo la emergencia por Covid19, así como los crímes y las amenazas, son la evidencia de que Honduras sigue siendo el país donde ejercer el periodismo es un gran peligro, sin que la impunidad baje un centímetro. Las instituciones estatales están inertes mientras el clima de violencia sigue subiendo a pasos agigantados.
El periodista Gustavo Andino, comentó a pasosdeanimalgrande.com que siente preocupación para el acceso a la información, por la represión, si la situación periodística para quienes critiquen las acciones del gobierno es censurada mediante tratos desde funcionarios que ejercen presión a las empresas e instituciones públicas y privadas, para que cancelen las pautas publicitarias a este tipo de medios.
Gustavo Andino, presentador del programa Justicia Ciega, desde el año 2019 habría denunciado bloqueos en la trasmisión del programa por medio de las páginas digitales, así como el cierre de las mismas, la negativa de fuentes oficiales a otorgarle información como en los casos del periodista Santiago López y Renato Álvarez.
Andino agregó que si el periodismo en Honduras ya se encontraba en una situación muy preocupante con altos índices de violencia, con este tipo de abusos se termina de afectar a medios principalmente si son independientes, hasta dejarlos sin ningún tipo de entrada económica.
Según Andino, el gremio periodístico no tienen ningún respaldo para detener los abusos, ya que el forma parte del Colegio de Periodistas de Honduras, (CPH), desde 1998 y no ha tenido ningún acompañamiento, más bien ha sido coactado porque la mayoría de la junta directiva está trabajando con el gobierno, como voceros en diferentes instituciones por eso es imposible que actúen en controversia.
“Ya hay una política de estado, para los periodistas que quieran ser objetivos y veraz, no apegados a los discursos del gobierno”, solo a los que les son fieles les va ir bien en cualquier contexto de país, el partido nacional que busca principalmente de obtener el poder van a buscar amedrentar la labor, dijo el periodista.
También el periodista Fidel Manurled de Radio Márcala, agregó que desde que inició el tiempo de cuarentena ha sido para los medios muy complicado no solo a las fuentes oficiales sino que también al ciudadano común, porque tienen miedo a ser contagiados, los dueños de medios son los que tienen que hacer muchas gestiones para lograr que uno realice un trabajo de campo sin problemas incluso para circular.
Periodista exige al CPH, respaldar o tener un posicionamiento por ataque a medio de comunicación
Whitney Godoy, fotoperiodista, expresó a Dagoberto Rodríguez, presidente del Colegio de Periodistas de Honduras (CPH), que se pronuncie con respecto a las violaciones a derechos humanos, hostigamientos, amenazas que han hecho contra el Perro Amarillo sin importar si están agremiados o no.
La fotoperiodista expuso la exigencia un día después, de que Milton Benítez, director del medio denunciara un allanamiento donde les robaron equipo de trabajo, acciones que se han repetido reiteradas veces por la crítica y exposición de actos de corrupción, fraude y narcotráfico ligados a funcionarios y gobernantes.
“Las violaciones de derechos humanos, hostigamientos, amenazas que se han hecho contra el equipo de El Perro Amarillo, son evidentes y debería una institución como la CPH respaldar o tener un posicionamiento, sin importar si se está o no agremiado. Pero claro no puedo pedirles mucho, cuando ni a sus propios agremiados pueden respaldarlos, ¿dónde está su lucha por exigir el pago justo a los periodistas? ¿Por qué permiten que los empresarios de la comunicación empleen a periodistas por contrato? Dejen de hacer tanto taller, conferencias y comunicados, que no han servido para nada, defiendan al gremio periodístico que está sometido, con un bozal y una bala lista para dispararles”, fue el mensaje que Godoy envió a Dagoberto Rodríguez, presidente del Colegio de Periodistas de Honduras, CPH.
Pasosdeanimalgrande.com solicitó una entrevista a Dagoberto Rodríguez, pero no concretó una respuesta, también para conocer la posición sobre los despidos e irregularidades laborales a trabajadores de medios.
La Asociación por la Democracia y los Derechos Humanos (ASOPODEHU), ha documentado tres casos de irregularidades laborales durante la pandemia, el despido del periodista Santiago López, supuestamente como consecuencia de una carta de la representante del Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (SINAGER), quien habría expresado que no quería que el comunicador la entrevistara; la renuncia de Josué Quintana de Diario La Tribuna, por no firmar una reducción de salario y el despido injustificado de Oscar Corea, del medio de comunicación Cadena Real Impacto, de Comayagua, después de laborar unos 20 años con pagos miserables,
Los medios de comunicación que han despedido empleados y reducido los salarios argumentan que es debido al cierre de negocios por la emergencia sanitaria y no están recibiendo la pauta publicitaria, aunque el Código del Trabajo y las regulaciones de la Organización Internacional del Trabajo, OIT, estipulan mecanismos a las empresas para que no afecten al empleado.