Lidia Ramos Simeón es esposa de Jeremías Martínez, ambos son defensores del medio ambiente. Él fue criminalizado por los delitos de usurpación, daños y tiene más de dos años de estar privado de libertad su el Juicio Oral y Público finalizó este 09 de marzo de 2021 y el viernes 12 de este mismo mes, se emitirá la sentencia.
Martínez fue capturado en su vivienda, ubicada en la comunidad La Concepción, Tocoa, Colón, por los escoltas policiales que realizaban el patrullaje en función de brindarle la protección en cumplimiento de la Medida Cautelar MC 50/14, otorgada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, (CIDH), por ser beneficiario de dichas medidas como ex dirigente del Movimiento Unificado Campesino del Aguán (MUCA).Los agentes lo habrían llevado engañado aduciendo que debía ir a firmar un documento, pero lo entregaron a las autoridades judiciales, quedando en prisión desde noviembre del 2018.
Nosotros vivíamos tranquilos, el río era clarito pero llegó la minera
Ramos Simeón explicó a pasosdeanimalgrande.com que este proceso ha sido muy duro y ha sufrido psicológica y moralmente. Desde que él fue privado de libertad la responsabilidad de la familia asumió los gastos económicos, incluso para el caso judicial o requisitos para poder verlo.
Agregó que si se cumpliera la ley en Honduras Jeremías no estuviera preso porque es inocente, y lo único que han hecho es decir la verdad que la Minera Los Pinares ha perjudicado el río y ha sido ayudada por las autoridades municipales que no son confiables, les mintieron a las comunidades en un cabildo abierto y le otorgaron la autorización a la compañía para que siga operando.
“Nosotros vivíamos tranquilos era bien lindo el agua fluía clarita para beber, el río era la fuente principal donde íbamos a traer agua hasta que llegó la empresa y contaminó todo el Río Guapinol y San Pedrito, ahora parece lodillo y tenemos que comprar el agua, a veces tenemos mucha escasez eso es lo único que hemos reclamado”, recalcó.
Denunció que a los ambientalistas los asesinan. En octubre del año pasado mataron a un muchacho que tenía requerimiento igual que Jeremías, “yo tengo temor por mis hijos al igual que los familiares de los otros siete defensores que están en Olanchito, al principio yo no hablaba por lo mismo, pero ahora con eso de que aparecen muertos en el monte donde nadie mira, no oyen y no dicen nada, solo los entierran y todo queda en la impunidad”, dijo.
Este 08 y 09 el Juicio Oral y Público de Jeremías Martínez continuó en la Sala 1 del Tribunal de Sentencia con Competencia Territorial Nacional, de la Corte Suprema de Justicia, donde el equipo legal conformado por Edy Tabora, Kenia Oliva y Omar Menjivar, solicitan una sentencia absolutoria que extinga la acción judicial.
El defensor fue acusado por la empresa minera Los Pinares y el Ministerio Público, con el nombre de Jeremías Martínez Díaz, una identidad que no corresponde a él, sin embargo de forma absurda así procedió el caso y se le dictó auto formal procesamiento en la audiencia inicial .
En la resolución 85/2020 el Grupo de Trabajo de Detención Arbitraria, un mecanismo creado por el Consejo de Derechos Humanos, de la Organización de Naciones Unidas ONU, detalló que se quebrantó una de las obligaciones básicas de un Estado-parte, que consiste en garantizar que todo individuo bajo su jurisdicción sea reconocido como persona ante la ley, en el caso de Jeremías Martínez, en primer lugar la persona requerida era Jeremías Martínez Díaz y a pesar de haber demostrado que las características físicas y número de identidad correspondía a otro individuo el juez decretó auto de formal procesamiento y le impuso la medida de prisión preventiva, a pesar de no existir ninguna acusación en su contra en ese momento.