“La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas ha tenido un desempeño lamentable, deplorable y desde nuestro punto de vista ha perdido nuestra confianza y credibilidad, ellos decidieron estar presentes en el conflicto anterior, como parte en un desalojo se colocaron al lado de las organizaciones que estuvieron con los estudiantes para darles protección”, declaró la rectora Julieta Castellanos en horas tempranas de la mañana de este 13 de junio de 2017, en el noticiero “TVC” de Canal 5.
La rectora señaló que la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), presionó a la universidad para que cerrara los casos de los tres estudiantes judicializados Cesario Padilla, Sergio Ulloa y Moisés Cáceres, lo cual a su parecer es una acción que no puede ser realizada, ya que una vez que se interpone la demanda y sigue el curso debido en los Tribunales y es imposible detenerla.
Sin embargo las actuaciones se dieron en el marco de los acuerdos en la Instancia de Monitoreo y Seguimiento, la cual fue creada en el marco de un documento que ponía fin al conflicto en la UNAH en el 2016.
Castellanos dijo no saber si la OACNUDH cuenta con personas entendidas en derecho, porque “quien acompañó a nuestros abogados fue el señor Félix Gómez, él siempre trató de imponer su criterio, sus puntos de vista y nos acusó a la UNAH de incumplir los acuerdos firmados”.
También consideró que “una situación grave, es que la Oficina del Alto Comisionado no tenga gente capaz y competente para que entienda lo que es un acto violento y lo que es una protesta pacífica y que a una toma de encapuchados le llaman de tal forma”.
Además opinó que el comunicado que emitieron un grupo de organismos internacionales de derechos humanos, carece del significado de lo que es “pacificó”, porque “creo que hay una deformación conceptual y teórica, asignándole la característica de paz a lo violento, a raíz de estos posicionamientos a los estudiantes se les enciende más la llama”, aseguró la funcionaria.
Estudiantes siguen demandando alto los procesos judiciales
Castellanos también reaccionó ante acciones del Movimiento Estudiantil Universitario (MEU) de ejecutar una toma de la Ciudad Universitaria y reveló que los apoderados legales de la UNAH se apersonaron ante el Ministerio Público impulsar acciones contra los estudiantes y solicitar un desalojo.
Por su parte, Belinda Flores, vicerrectora de la UNAH, informó que la denuncia que interpusieron ante el MP es meramente para efectos de investigación y proceder de acuerdo a análisis pertinente.
Negó toda participación de la UNAH en la infiltración de agentes de la Agencia Técnica de Investigación Criminal,(ATIC), desligándose totalmente de su participación, sosteniendo que los elementos realizaron sus acciones de manera independiente.
Derecho a la manifestación pacifica
Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, el derecho a la manifestación pacífica, está contenido en las libertades de reunión y de expresión.
De acuerdo a los Principios de la OIT sobre el Derecho a Huelga y la Declaración de Malta sobre Personas en Huelga de Hambre, en sus maneras de convocatoria y organización, la manifestación pacífica adopta múltiples formas y puede ser llevada a cabo por personas, grupos de personas u organizaciones con el propósito de llamar la atención pública sobre ciertos asuntos ciudadanos y reclamar la urgente solución a los mismos. Están las protestas y concentraciones realizadas en espacios públicos, las huelgas y paros laborales.
Casi siempre la manifestación pacífica es un punto de llegada y no un punto de partida, parece después que se han agotado otras vías de solución, durante un tiempo prolongado que ha excedido los límites de espera, porque los problemas se agravaron o hay daños inminentes a las personas.
Tambien señalan que la manifestación tiene fundamento jurídico en el derecho a la disidencia y está relacionada con la protección de las minorías y el respeto a los derechos individuales en el marco de una sociedad libre y democrática.