Ellner ha sido corresponsal de la Agencia de Noticias “Nuestra Patria Grande” y colaborador de diferentes revistas y periódicos digitales de Latinoamérica fue interceptado el 20 de octubre pasado por dos hombres cuando se estacionaba en un centro de Tegucigalpa. Al abrir una de las puertas de su vehículo para tomar su mochila, los hombres en motocicleta, uno de ellos con camisa manga larga, lo rodearon y le dijeron ‘hey vos hijoeputa hablás mucho, te vamos a cortar la lengua”.
La Unidad de Crímenes de Alto Impacto, dependiente de la Fiscalía de Delitos contra la Vida, es la carta de presentación internacional del Estado de Honduras para pretender hacerle creer a la comunidad internacional de derechos humanos y al sistema de justicia mundial que está adelantando en la lucha contra la impunidad a través de esta instancia que según dicen los funcionarios se encarga de investigar crímenes de alto impacto entre ellos de los periodistas que ya suman más de 50.
Aunque suena mucho en el ámbito internacional, en Honduras nadie sabe qué hace, nunca ha presentado un informe de avances en el trabajo, es decir existe, pero no existe. Mientras tanto los ataques contra periodistas los cuales pudieron evitar un crimen al investigarse, no se hizo y su caso está lleno de polvo e impunidad en las gavetas del Ministerio Público.
Eso ha permitido que no haya credibidad en esta instancia, las víctimas en su mayoría señalan que no pierden su tiempo en ir a denunciar y quienes lo hacen , dan por sentado que nunca investigarán nada.
Ricardo Ellner, un periodista de las nuevas generaciones, que escribe para diferentes espacios internacionales entre ellos rebelión.org; Kaosenlared y Nuestra Patri Grande, señala que simplemente escribe la realidad de Honduras y piensa que ese es el motivo para que se molesten los que hacen de la impunidad su diario vivir.
Semanas antes de la amenaza fue vigilado
En su entrevista con pasosdeanimalgrande.com este 02 de noviembre, precisamente cuando se conmemora el “Día Internacional para Poner Fin a la Impunidad de los Crímenes contra Periodistas”, se rió al señalar que “imagínese fue a la Unidad de Crímenes de Alto Impacto, porque cuando llegué al Ministerio Público allí me mandaron, es como una muerte anunciada y que solamente quedará en la historia”.
Su sonrisa se esfuma cuando relata que una semana antes de la amenaza hombres desconocidos merodeaban su residencia y se apostaban en sus alrededores, “pero no le tomé cuidado en ese momento, hasta después que hice un repaso de todos los acontecimientos”
En Congreso Nacional aprobó la Ley de Protección a Periodistas, Defensores y Defensoras de Derechos Humanos y Operadores de Justicia, las instancias a las que les compete esta tarea deberían de haber tomado este y otros casos graves, pues lo que se necesita es que reaccionen de manera preventiva porque ya después que han terminado con la vida de las víctimas la impunidad se encarga no solo de enterrar sus recuerdos sino de sembrar el terror y por ende la autocensura en los periodistas y comunicadores sociales.
El entrevistado señaló que no hay condiciones de seguridad para quienes son amenazados en Honduras, “estamos a expensas de los perpetradores, andamos con la muerte en las espaldas y los responsables de nuestra protección se encuentran muy bien gracias”.
Más de 50 periodistas han sido asesinados en Honduras desde el golpe de estado de junio de 2009, la violencia se ha exacerbado y Honduras es uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo.
“Es intolerable usar la violencia para silenciar a los periodistas porque supone un ataque a la sociedad en su conjunto. Pido a las autoridades de Honduras que pongan fin a la impunidad de los crímenes contra periodistas y hagan lo posible para procesar a sus culpables”, declaró en un comunicado la directora general de la Unesco, Irina Bokóva, en julio de este año.
Pero en Honduras los oídos de los funcionarios públicos encargados de terminar con la impunidad están sordos. En el caso de Ricardo Ellner los responsables de sus amenazas están al acecho.
Escritos que no les gustan a los violadores de la libertad de expresión
El 07 de octubre de este año, Ricardo Ellner esribió el artículo " Honduras: Expresión de Libertad en la dictadura", exactamente dos semanas antes de que fuera objeto de la amenaza de cortarle la lengua si seguía hablando.
Qué es lo que podría haber molestado de su artículo? y a quién molestó?. Entre otras cosas dijo que "en Honduras, no hay justicia por las y los 58 comunicadores asesinados en los últimos cinco años. En respuesta un 96% de impunidad, persecución política a disidentes y profundización de la corrupción en las instituciones del Estado; la tradición de las y los políticos se mantiene firme en el detrimento social de las mayorías".
También dijo que "La censura de prensa, la persecución a intelectuales, el allanamiento a medios alternativos, el asesinato de colegas, parafraseando a Rodolfo Walsh, son algunos de los acontecimientos que obligan a transcribir cada expresión de libertad que ha sido acallada de la forma más violenta en el territorio a complicidad de un gobierno que se ha negado a reconocer el dolor de todo un pueblo que clama justicia. Los medios de comunicación han sido cruentamente violados en su Libertad de Expresión. Morir o las sentencias carcelarias, son la respuesta que el oficialismo entrega a la libre emisión del pensamiento".
Quién se sentiría tan afectado con esas palabras?: "La expresión de libertad, la sostenemos a pesar del oprobio que proponen, es un derecho fundamental imprescindible para el ejercicio y la protección de las demás libertades, así como indivisible de los demás derechos. Sin la libertad de expresión y sin posibilidad de acceso a la información no se puede participar en el debate nacional sobre la política económica y social ni obtener la información imprescindible para proteger a las mayorías, en síntesis la expresión de libertad fallece".
Lea el escrito completo en este link:
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=204166