El actual movimiento estudiantil universitario en UNAH-VS se ha venido construyendo a lo largo de tres fases históricas.La primera fase “Resistencia Estudiantil” comprendida del periodo 2005-2007 se gestó desde la instauración de la Cuarta Reforma Universitaria. Dicha fase se caracteriza por poner en cuestión la esencia de la reforma: aplicación del examen de admisión, la falta de participación estudiantil legítima, la burocratización y centralismo administrativo en la universidad.
La segunda fase del movimiento estudiantil comprendida del 2008-2012, permite comprender la cuestión “Política-Organizativa” del movimiento estudiantil: la lucha contra el Plan de Arbitrios y la conformación de la Federación de Estudiantes (FAE). Esta fase estará marcada por la propuesta del desarrollo de la Asamblea Constituyente Estudiantil Universitaria (ACEU) propuesta por la FAE, El movimiento Amplio Universitario (MAU) y El Movimiento Lorenzo Zelaya (MER-LZ). La propuesta tenía como objetivo la conformación de los Órganos de Gobierno Estudiantil y sanear de esa manera la crisis de gobernabilidad de la universidad. Propuesta rechazada en el 2010 por las autoridades universitarias.
La tercera y actual fase del movimiento estudiantil comprendida del 2013-2015, a la que denomino “Académica-Estudiantil” en donde ya no se plantea meramente la participación estudiantil sino que se desvela el carácter mercantilista, autoritario, centralista y excluyente de la Cuarta Reforma Universitaria. Dicha fase es conocida por las movilizaciones masivas de los estudiantes en la UNAH-VS, los cinco puntos, si al Dialogo, toma de la UNAH-VS, el reciente proceso de expulsión de estudiantes en Ciudad Universitaria y VS. Esta fase aun insípida y en gestación, parece ser el horizonte alternativo del movimiento estudiantil para repensar la universidad pública en Honduras.
La construcción de este movimiento estudiantil no ha estado alejado de la lógica del actual proceso de reforma universitaria que desde el 2005 hasta la fecha viene poniendo en detrimento la calidad de la educación. El Examen de Admisión (2005), que ha excluido a más de 90 mil jóvenes; la creación de El Modelo Educativo (2008) que solo mide el carácter de eficiencia, competencia, calidad y eficacia del estudiante. El anteproyecto del Ley de Educación Superior (2013), que profundiza la desregularización de la educación en manos de la Empresa Privada. Las Normas Académicas (2014), que excluyen a miles de estudiantes por no cumplir estándares internacionales de calidad educativa; y la matrícula en torno a las Unidades Valorativas (2015), que en síntesis significa que el estudiante universitario genera grandes gastos y pérdidas a la universidad por la clases abandonadas y que por ende es necesario controlar el ingreso, egreso y permanencia de los estudiantes soslayando la situación socioeconómica del estudiante, la precaria calidad de los docentes y la mala infraestructura académica universitaria.
En el caso de la UNAH-VS y de los demás centros regionales de la universidad, el proceso de reforma es la manifestación de un trauma permanente en tres niveles. Primero, el centralismo administrativo-económico, según datos de la Secretaria de Finanzas de la UNAH 2015, UNAH-VS mantiene un presupuesto de 77 millones 851 mil 865 lempiras con 57 centavos para 16 mil 995 alumnos aglutinados en todas las facultades matriculados para este 2015 y la Facultad de Ciencias Médicas en CU 115 millones 875 mil 546 lempiras con 45 centavos para 6 mil 640 alumnos.
Segundo el centralismo institucional-infraestructural, según datos de la SEAPI 2014, en Ciudad Universitaria se comprende la suma de 116 millones 428 mil 723 lempiras con 60 centavos , para la construcción de distintos edificios y la UNAH-VS se comprende hasta la fecha un estimado de 54 millones 894 mil 213 lempiras , para la construcción del edificio de Ciencias Médicas.
Y un último y tercer elemento, el centralismo político -académico, las decisiones que orientan el actual proceso de reforma se hegemoniza en la manipulación absoluta de las autoridades universitarias en Ciudad Universitaria, en la cual proporcionalidad de poder y equilibrio es cooptada por ésta, en detrimento de la participación de los directores de los centros regionales.
En ese amplio panorama las demandas de los estudiantes en UNAH-VS que se muestran en contra de la tabla de Unidades Valorativas para poder matricularse y afectando en totalidad a Carreras de Odontología y Medicina, son demandas que complejizan ese conjunto de hechos explicados anteriormente: el cierre de espacios por parte de las autoridades universitarias que frena los procesos de participación estudiantil, la inversión desmedida en infraestructura de servicio burocrático sin lograr una modernización técnica y tecnológica de las carreras y el carácter excluyente de la reforma universitaria, son elementos que están allí, en la denuncia del actual movimiento estudiantil en UNAH-VS.
Por su parte las autoridades universitarias quienes reducen a juego mecánico y determinista el actual proceso y problemática de la reforma, sacuden sus miedos con amanezas de cancelar el periodo académico en UNAH-VS, como un acto de presión hipócrita y antiacadémico que solo pone en relieve el carácter autoritario y centralista de estas actuales autoridades universitarias.
El actual movimiento estudiantil se enfrenta a múltiples desafíos para abrir cauce a un nuevo proceso de reforma universitaria que recoja la problemática estudiantil y los problemas de país. Trataré de abordar ese punto en una próxima entrega.