“Nosotros creemos que lo que en los años 80 era el 3-16 se ha trasladado hacia nuestros territorios y que en ese mismo listado sabemos que desde el 2013 lo encabezaba nuestra compañera Berta Cáceres y el resto de la Coordinación General del COPINH”, puntualizó Gómez Membreño.
El Coordinador del COPINH señaló además que producto de estas nuevas amenazas, varios de sus integrantes, tanto de la dirección general como la de base, han tenido que salir de la zona para garantizar su vida.
Estos actos de intimidación son ejecutados, según el líder indígena-lenca, por al menos 20 personas ligadas a la empresa Desarrollos Energéticos, S.A (DESA), mismas que han provocado actos de violencia contra quienes defienden el Rio del capital extractivo.
Lo anterior suma a lo ocurrido el pasado 06 de mayo, previo a la movilización del COPINH hacia Tegucigalpa, cuando fue atacado a balazos Alexander García Sorto, Líder de base en la aldea Llano Grande, Colomoncagua, siempre en el departamento de Intibucá, por un hombre que en el pasado fue militar, guardia de seguridad y se ha declarado enemigo del COPINH.
Una bala le impactó en el hombro izquierdo y de acuerdo a una denuncia pública que hizo la organización, la policía en aquel sector detuvo al militar que atacó a García Sorto pero que inmediatamente fue puesto en libertad, según un comunicado del COPINH.
Amenazas se extienden hacia las casas de habitantes en Rio Blanco
Además de las amenazas de muerte, nuevas acciones de intimidación han surgido para frenar la denuncia y resistencia del pueblo indígena-lenca se extienden hasta sus casas, en donde se les amenaza con quemarlas si no permiten que DESA continúe su trabajo en el Rio Gualcarque, confirmó Tomás Gómez Membreño.
“Una de ellas son las de incendiar las casas , en los últimos momentos hemos recibido llamadas ante esta amenaza y los compas se muestran preocupados por esta acción de parte de los empleados de DESA”, acotó.
En el mismo contexto, las amenazas se suman con el proceso de recuperación de tierras en la Vega del Achotal, en Rio Blanco, cuyo terreno fue usurpado por DESA para la construcción del Proyecto Agua Zarca, violentando el derecho a la consulta previa, libre e informada como lo estipula el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, (OIT).
El 23 de mayo de este año, mientras los pobladores laboraban la tierra en la vega, los señores Virgilio y Aldair Madrid llegaron armados a decirles que debían abandonar la zona porque no son sus dueños, según testimonios que tiene en su poder el COPINH.
Otras acciones de intimidación que denunció Gómez Membreño es que los empleados de DESA llegan al punto de que cualquier carro que se desplace al Rio Gualcarque, “lo vigilan para agredirlo”, como lo que ocurrió el pasado 15 de mayo en donde fue agredida una caravana encabezada por familiares de Berta Cáceres, líderes y lideresas sociales y diputados del Partido Libertad y Refundación (LIBRE).
Continúan acciones a nivel internacional en demanda de justicia para Berta Cáceres
Ante el silencio que guardan las autoridades de justicia en la investigación que están desarrollando y al solo mostrar la captura y posterior condena de cinco responsables de este hecho, para la organización defensora del pueblo lenca no es suficiente, hasta que se dé con los autores intelectuales que planearon el asesinato contra Berta Cáceres.
Podemos ver que a casi tres meses del asesinato de nuestra compañera, los que aprobaron la concesión, quienes dirigen la empresa DESA están impunes. Por eso continuamos exigiendo la salida de este proyecto hidroeléctrico.
Otro de los elementos que ha puesto como en jaque la continuación del Proyecto Agua Zarca, es que los órganos financieros internacionales han retirado sus fondos para su construcción e incluso conformaron una comisión para visitar “in situ” Rio Blanco y conocer la realidad de este pueblo desde los testimonios de los pobladores y no solo de los que la usurpan.
Creemos que es una presión más, pero nos falta luchar, por eso el próximo 15 de junio habrá manifestaciones en las diferentes embajadas de Honduras a nivel mundial para que se atienda el llamado de justicia para nuestra compañera Berta y la salida de la hidroeléctrica del Rio Gualcarque, sentenció el Coordinador del COPINH.