El joven dijo lo anterior a pasosdeanimalgrande.com a “Historias no contadas de una huelga de hambre en la UNAH”, en una fría noche de las tantas que le toca pasar desde que hace 48 días se inició la huelga de hambre en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, UNAH.
La experiencia más bonita en el espacio fue encontrarse con una familia como denominó a sus compañeros de lucha, saber que existen personas con las que comparte su pensamiento de transformación de la sociedad, además que se interesan por lo que le pasa y lo cuidan.
“Sentirme parte de una familia fue lo que más me interesó al ingresar en el movimiento”, dijo Aguilar.
Lo más difícil para él en el proceso es ver tanta apatía en las personas que son ajenas a todo lo que sucede, se le dificulta entender por qué los rechazan cuando se manifiestan.
El principal sueño de Saúl es obtener un título universitario extendido por la UNAH.
“Hay que derrocar a estas autoridades universitarias porque han sido parte de un atraso en la universidad en el momento que no dejan participar a los estudiantes”, sentenció.
Ingresar a la huelga de hambre significa “una forma de expresión pacífica y demostrar que no somos personas que no solo lanzamos piedras, sino que también pensamos, no somos vagos ni delincuentes como dicen algunas personas”, expresó el universitario.