De acuerdo a lo informado por Rodríguez este día altos jefes de la policía llegaron a ofrecerle disculpas por la detención ilegal, lesiones y daños a su cámara ocasionados por agentes policiales de Olanchito, Yoro, cuando él cubría la detención de su hermano el pasado sábado.
“Aunque la detención ilegal y los daños pueden ser objeto de un acuerdo conciliatorio o de otra medida desjudicializadora, pero para ello requiere mínimamente que la Fiscalía tenga conocimiento de los hechos a través de una denuncia e incluso se haya presentado la acusación ante el juzgado”, explicó Menjívar.
Aclaró que si se estima la concurrencia de un delito de tortura ese no es objeto de conciliación ni de suspensión de la persecución penal.
Ya es una práctica policial
Hay dos hechos parecidos a lo ocurrido a Rodríguez, uno es en San Lorenzo Valle y otro en Ocotepeque, donde dos periodistas fueron detenidos por la policía y hasta la fecha no hay persecución penal por parte del Ministerio Público.
El 11 de diciembre de 2017 fue detenido el periodista Josué Neptalí Rubí, del canal de TV Telesur, en el municipio de Nacaome, en el departamento de Valle, fue arrestado mientras hacía la labor periodística al cubrir una protesta en la cual se estaban llevado a cabo represiones contra los manifestantes. El periodista fue detenido por la Policía Nacional y militares de la 101 Brigada
Entretanto Enrique Gamoneda, un periodista ciudadano que ejerce la libertad de expresión por las redes sociales, denunció que el 26 de enero del año en curso fue detenido, torturado y llevado preso solamente porque filmaba también una represión policial.