Jairo López fue querellado por Alejandro Aguilar, dueño de MetroTV, según lo denunció el comunicador fue una instrumentalización desde el presidente del Congreso Nacional, Mauricio Oliva, muy cercano al querellante, cuando el periodista denuncio que había un pegue ilegal de agua en el local donde funcionaba el medio de comunicación.
La asociación por la Democracia y los Derechos Humanos, ASOPODEHU, ha acompañado a López desde la primera audiencia de conciliación y después en el juicio oral y público, donde se produjeron una serie de irregularidades, desde extravío de pruebas donde el periodista respaldaba su denuncia de la empresa Aguas de Choluteca que había emitido un informe al respecto.
La ASOPODEHU realizó las acciones legales correspondientes ante la Fiscalía de Enjuiciamiento a Funcionarios Públicos y a la Inspectora de Tribunales contra todos los jueces del Tribunal de Sentencia. Todos ellos renunciaron a seguir conociendo de la causa y la Corte de Apelaciones nombró nuevos jueces.
En el ínterin del juicio Jairo López ha sido objeto de campañas de desprestigio, persecución, seguimientos, amenazas a muerte, desprestigio de su familia, entre otras cosas que ha tenido que pasar por ser uno de los pocos periodistas críticos que quedan en la zona. En la actualidad tiene medidas del Mecanismo de Protección consistente en patrullajes y una escolta permanente, lo cual debe ser cumplido por la Policía Nacional, en la regional de Choluteca.
La última acción fue el querer imponerle una escolta a espaldas del beneficiario y del Mecanismo de Protección cuyas autoridades dijeron desconocer que el Comisionado Lorgio Mejida Tinoco había decidido unilateralmente enviarle una escolta de Tegucigalpa, a pesar que no ha sido una decisión del afectado y del Comité Técnico, integrado por instituciones del Estado entre ellas la Secretaría de Seguridad .
La sorpresa para Jairo López ocurrió el 14 de septiembre cuando unos supuestos agentes le llamaron para decirle debe cambiar escolta acá estamos , ni siquiera Mejía Tinoco le habló sino personas extrañas, lo que pareció muy sospechoso y más aún cuando el periodista había recibido información de que había una operación encubierta para generar el caos el 15 de septiembre y capturarle echándole la culpa de disturbios ese día.
Hilos del poder se mueven sin descanso
Quien podría creer que una simple medida de protección donde la policía solamente debe cumplir con la implementación ha sido duramente torpedeada. El Mecanismo de Protección se ha quedado a veces hasta corto para enfrentar la desobediencia a la Ley de Protección desde los altos mandos policiales.
Aquí confluyen muchos mandos, incluido el jefe regional de la policía que ha pretendido deslegitimar la labor periodística de Jairo López, junto a otras fuerzas de seguridad que se mueven en el sector.
No ha sido fácil para López enfrentar la presión , ejercer el periodismo en una región con problemas de corrupción y abusos desde el poder, la gente parece haberse cansado de eso y desde diciembre de 2017 con el fraude electoral renuncio a quedarse de brazos cruzados y ahora sale a las calles a protestar por toda esa situación religiosamente los miércoles y los sábados de todas las semanas.
Abogada de ASOPODEHU interpone Recurso por Desistimiento Tácito
Pasados más de tres meses que el querellante no accionó en la causa y a pesar de haber sido citado para el juicio oral y público no se hizo presente al mismo, la abogada Karla Escalante interpuso un acción por desistimiento tácito de acuerdo a lo que establece el Código de Procedimientos Penales para lo cual se realizó una audiencia Ad-Hoc, a principios de septiembre donde tampoco se presentó el querellante, realizándose otra el 20 de septiembre, donde la abogada de éste pretendía una conciliación , la cual ya era extemporánea.
Ese 20 de septiembre Alejandro Aguilar si se hizo presente y trato de justificar la falta de acción lo cual no logro acreditar ni convencer al juez, por lo que el togado declaro sobreseído el juicio porque se aplicaba el desistimiento tácito.
A la salida del tribunal ese 20 de septiembre, Aguilar llegó hasta donde Jairo López se encontraba junto a delegados de la ASOPODEHU y manifestó que para el era bueno lo que había ocurrido porque ya no quería seguir adelante, “ a veces uno comete errores, pero gracias a Dios se ha dado esto, estoy a la orden con mis tres programas que tengo en mi medio de comunicación”, dijo mirando a López quien tiene vedado ejercer el periodismo porque hay “orden “ desde el Congreso Nacional y Casa Presidencial de que no le alquilen un espacio en ningún medio para continuar difundiendo su programa El Informador.
Este 25 de septiembre de 2018 las partes a audiencia de notificación de la resolución por escrito
Hoy es un día muy importante para mi vida y para el periodismo, nunca me imaginé que iba a pasar por algo así , doy gracias a Dios por todo esto y al acompañamiento de la ASOPODEHU que ha sido vital junto con su periódico digital pasosdeanimalgrande.com” señaló el comunicador.
“Estoy muy contento porque hoy el juez dará el documento de sobreseimiento definitivo y aquí puedo ver la justicia de Dios manifestada. Dios siempre va a estar con el justo y aquel que busca la justicia. Va a ser de muchas lágrimas pero de alegría”, dijo el comunicador muy emocionado.
Mientras esto sucede, las investigaciones sobre las amenazas no han sido investigadas por el Ministerio Público , apenas un requerimiento fiscal contra una mujer que es activista del Partido Nacional y que lo amenazó de muerte llamando a su programa El Informador, la utilización de ella por parte d este partido fue notaria en una audiencia donde Jairo decidió conciliar con ella si cumple con una disculpa p[pública a través de medios de comunicación.
El Ministerio Publico saco esta carta en momentos en que se encontraba la Comisión Interamericana de Derechos Humanos , CIDH, en Honduras . Este organismo anuncio libramiento de 18 requerimiento fiscales contra agresores de periodistas, a la fecha solo fue pura campaña mediática, lo que deja de manifiesto que no hay voluntad política para terminar con la violencia contra periodistas. La joven mujer solo fue el chivo expiatorio del Partido Nacional y del Ministerio Público.