El sábado 10 de noviembre de 2018, López quien irónicamente está amparado por la Ley de Protección para Periodistas, Comunicadores Sociales, Defensores de Derechos Humanos y Operadores de Justicia, fue llevado violentamente de su casa por hombres encapuchados que se creía pertencían a escuadrones de la muerte, pero posteriormente se supo que eran policías de la Dirección Policial de Investigaciones, DPI. El afectado fue trasladado a los juzgados de letras de San Lorenzo, Valle donde se le informaron que tenía una orden de captura por el delito de daños contra la Empresa Energía Honduras, EEH. Fue liberado con medidas sustitutivas a la cárcel y tendrá que trasladarse desde Choluteca dos veces por semana hasta San Lorenzo para cumplir con el requerimiento jurídico.
No es afiliado al CPH y no emitiremos ningún comunicado
El presidente del Colegio de periodistas de Honduras ha reconocido en entrevista a pasosdeanimalgrande.com, que como ente gremial es poco o nada lo que pueden a hacer en el caso de abuso de poder del Estado en contra Jairo López. Ellos según aduce, no están en disposición de emitir ningún documento como protesta o solidaridad ante la captura del comunicador.
En razón de esta persecución y captura en contra de un comunicador social, se le consultó a Dagoberto Rodríguez cuál es la postura del Colegio de Periodistas de Honduras después del episodio registrado y admite que como organización no emitirán ningún acuerdo o comunicado puesto que la víctima de agresión policial no figura entre sus registros como colegiado, dejando claro que la organización solo vela por los intereses de los suyos, según aseveró.
En relación que si considera procedente asumir posturas en solidaridad con Jairo López, más como un atentado al periodismo en general, que como afiliado en particular, argumentó que las opiniones dentro del CPH estaban divididas en torno a este caso en particular y por tanto no pueden manifestarse a través de un comunicado sin un acuerdo homogéneo de los directivos, pero aseguró que él a título personal en su cuenta de Twitter sí se manifestó en favor que se le respetara al comunicador capturado, su integridad personal igual que sus derechos.
Es de recalcar que en anteriores ocasiones el Colegio de Periodistas de Honduras sí ha salido a manifestase en solidaridad ante agresiones contra periodistas y camarógrafos de medios como Diario la prensa, en 2011 y a principios de 2018.
El mismo Rodríguez en nombre del CPH alzó la voz de protesta para denunciar una supuesta campaña de odio montada en contra de directores, jefes de redacción y coordinadores de medios, desde la redes sociales y denunció también casos de violencia física por parte de la policía en contra de periodistas nacionales y extranjeros, lo que representó para él CPH en aquel entonces un atentado para la libertad de expresión.
En su momento el directivo dijo que “El periodista es un trabajador de la comunicación, que se limita a informar lo que ocurre, el periodista no es el que define la política editorial de un medio de comunicación. De modo que el llamado es a respetar la libertad de prensa, a respetar la libertad de expresión, y frente a estas amenazas y agresiones estaremos acudiendo mañana al Ministerio Público a hacer la denuncia formal, por agresiones que han sido objeto los periodistas por parte de las fuerzas del orden, como por simpatizantes de la Alianza de oposición.”
APH también se llama al silencio
Por su parte Carlos Ortíz, representante de la asociación de periodistas de Honduras APH, admitió que en ningún momento se interesaron en ponerse en contacto con el periodista y no supo explicar cómo a pesar de reconocer que “estamos ante un caso grave de violación a la libertad de expresión”, ellos como Asociación no se han preocupado por pronunciarse, lo único que hicieron fue mostrar solidaridad desde sus cuentas personales indicó.
Con anterioridad la APH también ha mostrado solidaridad contra ataques similares al de Jairo López. Con el encabezado “una cámara no vale más que la vida”, en junio de 2018, el ente fustigaba el ataque recibido por parte de policías al camarógrafo de canal 11, Ángel Padilla, también mostraron su descontento por ataques hacia periodistas que laboran para el canal HCH y contra elementos militares que en el marco de la crisis post electoral a principios del 2018 agredieron a otros periodistas nacionales.
A pesar que los ataques a Jairo López vienen desde hace mucho tiempo y en diferentes formas desde obstrucción laboral, amenazas a muerte, persecución por razón de su labor, procesos judiciales, estigmatización y difamación, nada de eso ha sido suficiente para mover el acompañamiento de los miembros de la APH y CPH.
Sin embargo Carlos Ortiz afirmó que el ser crítico no debería ser considerado un delito por parte de los operadores de justicia y del mismo Estado.
Él, a nivel personal admitió que la libertad de expresión está en alerta roja por casos como el de Sandra Maribel, Gilda Silvestrucci, Claudia Mendoza y cientos más que tal como es el caso de Jairo López, son considerados un estorbo por el poder de político y empresarial que ven en la denuncia periodística un obstáculo para desarrollar sus proyectos.
Ambas organizaciones gremiales son los representantes de los periodistas y comunicadores sociales ante el Consejo de Protección desde donde se deben impulsar acciones para que la libertad de expresión y de prensa sea respetada y se proteja a los beneficiarios de dicho ordenamiento jurídico.