En las demandas establecidas en el documento la Mesa de Derechos Humanos también exigió a la justicia hondureña  una investigación pronta, expedita e imparcial a través de una comisión independiente donde se integre el Alto Comisionado de los Derechos Humanos y proceder a la deducción de responsabilidades a los agentes que procedieron a torturar al médico.

Las alarmas se pusieron en rojo este 10 de agosto del corriente año cuando Girón denunció en redes sociales que estaba siendo detenido y acusado de un delito que no cometió, responsabilizando directamente al presidente Juan Orlando Hernández y a su Ministro de Seguridad de cualquier atentado contra su vida. El galeno permaneció más de 12 hora detenido en la Policía Metropolitana Número Uno, donde fue torturado por varios policías encapuchados al interior de esa estación de policía.

La Mesa de Derechos Humanos ques está conformada por más de 15 organizaciones de derechos humanos de Honduras y  que tienen redes en el interior del país,  se pronunció sobre esta arbitrariedad en momentos en que Girón aún permanecía en calidad de detenido, pero que estaba interno en el seguro social debido a las torturas propinadas por agentes estatales. Unas horas después del mediodía fue dejado en libertad "por ahora", según trascendió.

Esta red de organizaciones dejó entrever que la represalia podría haberse llevado a cabo porque Girón  llamó la atención de la opinión pública al desmentir públicamente al presidente de la República Juan Orlando Hernández con relación a que había adquirido el Covid-19 y afirmó que su padecimiento era ajeno al virus y que este era producto de ciertos excesos que afectaban su organismo.

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