Horas después de que recibiera el Premio Franco-Alemán de Derechos Humanos y Estado de Derecho, a José Zambrano, defensor de derechos LGTBI, le fue incendiada la casa, de la cual tuvo que huir junto a tres miembros de su familia para poner a salvo sus vidas, a pesar de ello, llegaron hasta la casa donde se resguardaron para amenazarle de muerte.
Zambrano es miembro fundador de la Asociación para una Vida Mejor de Personas Infectadas y Afectadas por el VIH/SIDA en Honduras (APUVIMEH) y la Casa (refugio) Renacer y ha dedicado unas cuatro décadas a defender los derechos humanos tanto de su comunidad como del pueblo hondureño en general, debido a ello ha sido objetivo de innumerables amenazas que han puesto en grave riesgo su vida.
Premio y quema de su casa
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Zambrano recibió el premio el pasado 22 de diciembre de 2020 de manos de Los embajadores Jens Janik, de Alemania y Emmanuel Pineda, de Francia, le entregaron el premio el 22 de diciembre pasado. El galardón fue bastante difundido por diferentes medios de comunicación, y el día 23 de diciembre su casa fue incendiada por desconocidos, situación que fue informada por APUVIMEH a la Ministra de Derechos Humanos, Karla Cuevas en esa misma fecha en que ocurrieron los hechos.
Los hechos dejan de manifiesto que el odio contra la comunidad LGTBI y en especial aquellas personas que son visibles para la defensa de los derechos fundamentales de una comunidad muy discriminada y reprimida, pretende sacarlos de la escena para que no sigan en su quehacer fundamental.
La APUVIMEH a través de su Directora Sandra Zambrano externó su preocupación por la vida del defensor porque cree que está en la línea de la muerte, “nos preocupa mucho su situación y es urgente protegerlo, estamos haciendo algunas acciones para lograrlo, ojalá no sea demasiado tarde”, dijo a pasosdeanimalgrande.com
En esta delicada situación se necesita la solidaridad urgente de la comunidad nacional e internacional para proteger su vida. Los gobiernos de Alemania y Francia deben actuar de inmediato para evitar un desenlace fatal, con él corren peligro los miembros de su familia que están a su lado.
Asimismo el Estado de Honduras tiene la obligación de protegerle de inmediato. El Mecanismo Nacional de Protección debe actuar de oficio teniendo conocimiento de este hecho.