Alvarado fue sentenciado en diciembre de 2013, a un año cuatro meses de prisión, inhabilitación del ejercicio periodístico y otros derechos, a consecuencia de una querella interpuesta por Belinda Flores, funcionaria de la estatal Universidad Nacional Autónoma de Honduras, que inició sus acciones desde el año 2006 como represalias porque el comunicador social permitió que catedráticos de ese centro de estudios denunciaran que ella estaba involucrada en tráfico de títulos. Aunque conmutó la prisión, una Corte de Apelaciones autorizó la inhabilitación en su profesión, a pesar de que con la extinción de la pena principal sucedía lo mismo con las accesorias.
Ante esa arbitrariedad se denunció el caso ante la CIDH y también medidas cautelares para protegerlo en su ejercicio periodístico y la violación de otros derechos fundamentales, a lo que ese organismo otorgó la medida cautelar el pasado 05 de noviembre de 2014 donde se señala al Estado que suspenda temporalmente la sentencia mientras se pronuncia sobre la admisibilidad del caso, pero la renuencia en la implementación de la medida ha sido cada vez más fuerte.
Eso obligó a las peticionarias ante la CIDH a solicitar una reunión de trabajo entre el Estado, la CIDH y éstas para lograr acuerdos, en ese espacio el Procurador General de la República se comprometió a enviar una comunicación a la Corte Suprema de Justicia informándole sobre este compromiso y que se mantuviera la suspensión de la sentencia. La CIDH le anunció a los representantes del Estado de Honduras que sería notificado en estas semanas para que se pronuncie sobre la petición de admisibilidad.
Estado muerto de la risa ante compromisos internacionales
Pero los compromisos internacionales le valen al Estado de Honduras y la noche de este 29 de octubre a la salida del Noticiero Mi Nación en Globo TV, el Juzgado de Ejecución procedió a pegar dos notificaciones en puertas del medio de comunicación, una para el dueño de Globo TV y Radio Globo, Alejandro Villatoro y la otra para Julio Ernesto Alvarado donde señala que lo ha notificado. La primera tiene fecha de 30 de septiembre de este año y la segunda sin fechas ni firmas.
Ya es la tercera pasada en menos de ocho días que le hace este Estado a la CIDH, las dos anteriores se relacionan con el plantón que diera al no llegar a dos audiencias públicas sobre corrupción de las instituciones públicas y la falta de independencia judicial, pero a las mismas brilló por su ausencia. Lo que significa que hay sincronización de acciones entre el actual mandatario Juan Orlando Hernández con todos los poderes del Estado y las instituciones que están bajo su puño.
Con estas actuaciones se evidencia que el actual gobierno va con todo contra los derechos humanos y viene la agudización de tiempos más difíciles para Honduras.
La CIDH deberá pronunciarse sobre este hecho que pone en entredicho la existencia del sistema interamericano de justicia que forma parte de los convenios y tratados internacionales suscritos por el Estado hondureño.
Han sido intensos meses de acoso judicial contra el periodista en mención, en incremento desde la emisión de la medida cautelar. La forma desafiante en que se le pretendió notificar en momentos que la CIDH hacía una visita in loco a Honduras el diciembre de 2014 y esta sería la segunda afrenta a este organismo internacional de justicia.
Nunca había sucedido una persecución tan atroz
Es una persecución fuera del sentido común, no entendemos como esta Corte se atreve a querer inhabilitarme llevándose de encuentro toda la civilización, todo lo que es culto, se han dado a conocer como lo más bajo, es lo peor que le puede estar pasando a la prensa y es un indicativo de lo que está pasando en el país, estoy sorprendido e indignado, señaló en su primera reacción Julio Ernesto Alvarado a pasosdeanimalgrande.com
Aquí quien tiene la última palabra es la CIDH, y lo que pueda hacer mis peticionarias. Yo no he aceptado eso, no lo he suscrito porque tengo medidas cautelares, no acepto esta arbitrariedad, agregó
Sospecho que ellos están jugando sucio y se han puesto de acuerdo con la gente de la Corte Suprema para hacer esta cochinada, es insólito que hace ocho días el gobierno se comprometió con la CIDH , en presencia de mis peticionarias, ha sido muy irrespetuoso esto, y quiere decir que lo que se habló quedó en nada, denunció.
Asimismo desatacó la prepotencia con que llegó la delegada del Juzgado de Ejecución, “una señora llegó con mucho irrespeto, se metió al canal a lugares que no debió acceder y dejó prensados los papeles en la puerta de la administración de la Globo”.
“No me siento derrotado, estoy en mi derecho, tengo medidas cautelares, no me estoy escondiendo de nada, ni de nadie, no huyo, y seguiré adelante, llegaré mañana –este viernes 30 de octubre- a mi programa porque estoy respaldado por las medidas cautelares y esto es primario, deben respetarse. Lo que ha hecho la Corte no tiene valor”, concluyó Alvarado.
Notificaciones dejadas en la puerta de la administración de Radio Globo y GloboTV:
1.-Para Julio Ernesto Alvarado, nótese que no tiene firmas ni fecha:
2.-Para el dueño de GloboTV y Radio Globo donde Julio Ernesto Alvarado transmite el Noticiero Mi Nación, pero con fecha 30 de septiembre pasado |