La Universidad Nacional Autónoma de Honduras, UNAH es de corte napoleónico, donde son evidentes las desigualdades y tiene el sistema en crisis por el desmantelamiento de los órganos de participación, lo que ha mutilado la institucionalidad, la única esperanza es la emrgencia del movimiento estudiantil que ha desafiado el poder, son algunas de las conclusiones del Foro-Taller Rescate de la Academia en la crisis universitaria”, convocado por la Asociación de Docentes de la UNAH, ADUNAH y el Movimiento Estudiantil, MEU, este 23 de agosto de 2017.
En el encuentro que culminó con mesas de trabajo para abordar la actual crisis universitaria, participaron estudiantes, docentes, defensores de derechos humanos, sindicatos, organizaciones de sociedad civil y populares.
Sumado al autoritarismo se evidencia la reproducción de élites, la concentración del poder en la rectora Julieta Castellanos a través de la violación a la Ley, mantiene a la UNAH envuelta en la crisis y en la mercantilización sujeta a la lógica del mercado, destacaron los panelistas entre los que participaron Mauricio Durón, con el tema “IV Reforma y Comisión de Transición”; Roberto Briceño, habló sobre “El gobierno de Julieta Castellanos y Crisis Universitaria”; Héctor Ulloa del MEU con “Crisis Universitaria desde la visión estudiantil” y “Derechos humanos en la educación superior”, por Dina Meza de la ASOPODEHU.
Ante este panorama gris lo que da esperanzas es la emergencia de la rebeldía de los estudiantes que han enfrentado el poder y se ha convertido en el movimiento punta de lanza en Honduras para el rescate de la democracia, expusieron.
Otra de los señalamiento es que hay mutilación de la institucionalidad , en la actualidad con un gobierno de facto pues desde el 25 de julio se debió convocar a concurso del nuevo rector y las demás autoridades.
Sin embargo no debe verse la crisis empujada por una personas sino que es algo sistémico donde cualquiera que llegue al cargo puede continuar con las prácticas nefastas que en la actualidad se llevan a cabo.
Se destacó además que la UNAH es un experimento para tratar de enterrar el pensamiento libre utilizando el derecho penal para criminalizar a los y las estudiantes que protestan y además la instrumentalización de los operadores de justicia para sembrar el temor.
Se incluyó además la violación a los derechos laborales de los docentes a través de la precarización del trabajo y la represión laboral a través de las amenazas constantes, suspensiones temporales y audiencias de descargo en total indefensión, para que no se identifiquen con el movimiento estudiantil.
Las anteriores reflexiones sirvieron de punto de partida para mesas de trabajo donde varios grupos discutieron temas alrededor de la crisis universitaria.