Lakhani ha develado varias situaciones que se han dado en el asesinato de Berta Cáceres y ella se encuentra en el país cubriendo el juicio que se tenía programado este 17 de septiembre contra ocho de los imputados en el caso. Además ha investigado otras problemáticas de derechos humanos que se han producido desde el golpe de Estado de 2009.
Esta nueva acción coincide con otras realizadas por la empresa Desarrollos Energéticos, S.A, DESA, señalada por la familia de Berta Cáceres de estar directamente involucrada en el crimen. El mismo 17 de sepriembre que fue emitido el comunicado contra Lakhani, un grupo de afin a la compañía, llegó a la Corte Suprema de Justicia donde se encontraban decenas de personas exigiendo justicia y castigo para los responsables del asesinato, por lo que podría tratarse de otra artimaña para desacreditar cualquier acción en la búsqueda de la verdad sobre el caso.
Igualmente la empresa hidroeléctrica lo ha pretendido hacer con un bufete internacional de abogados, con el objetivo de echar por tierra pruebas irrefutables de los abogados acusadores y que representan a la familia de Cáceres.
Lo mismo con otra periodista
En mayo de 2016 a través de la página de Facebook “Nos queda claro”, se entronizó otra campaña de desprestigio contra la periodista Italo-alemana Giulia Fellin a quien acusaron de estar infiltrada "en los relajos protagonziados por el COPINH" . “Pedimos a las autoridades que expulsen inmediatamente del país a estas personas que no pertenecen a Honduras, porque las consideramos dañinas que solo representan un peligro ya que incitan a la violencia y odio”, señalaba la publicación.
El contexto en ese momento eran las demandas de justicia por el crimen de Berta Cáceres y una manifestación del COPINH fue reprimida violentamente cuando llegó a Tegucigalpa,capital de Honduras.
Fellín debió salir del país para salvaguardar su vida por la persecusión montada por Migración y la campaña de odio circulada por esa cuenta de Facebook. Hasta la fecha a pesar de que se interpuso la denuncia ante las autoridades competentes, entre ellas el Ministerio Público para que se investigara la procedencia de las amenazas, el expediente quedó engavetado.
Este es el comunicado de la Red Internacional que denuncia este ataque al ejercicio periodístico de Nina Lakhnani: