El diputado suizo Fabián Molina, se marchó de Honduras con serias preocupaciones en cuanto al peligro que enfrentan las personas defensoras de derechos humanos; el riesgo de un fraude electoral; el incremento del autoritarismo y falta de democracia, situaciones que comunicará a su parlamento y gobierno, con el objetivo de presionar para que no se cancele la cooperación para Honduras y se continúe trabajando para el respeto de derechos humanos, según expresó unas horas antes de su partida en una entrevista con pasosdeanimalgrande.com.