Miriam Miranda ha sufrido innumerables ataques por la defensa de los territorios, entre ellos palizas policiales cuando se ha manifestado en las calles; secuestro por hombres fuertemente armados; cárcel por la defensa de los derechos humanos y una intensa campaña de estigmatización.
Este 21 de agosto llegó a Tegucigalpa a protestar en las afueras de la Corte Suprema de Justicia, junto a la Asamblea de Mujeres Luchadores por la impunidad en que se encuentra el crimen contra Berta Cáceres y la reiterada violencia hacia las mujeres que defienden los territorios.
"Es un Mecanismo que no sirve para ningún carajo, desde el mes de febrero de este año entre las medidas de protección consensuadas ante el Comité Técnico del Mecanismo estaba la provisión de seguridad, pero hasta la fecha no lo han cumplido. El 02 de agosto le dispararon a un compañero en Vallecito y una semana después llegó gente armada a la zona amenazando a la comunidad y el Mecanismo no ha dicho esta boca es mía”, denunció muy molesta Miranda.
Explicó ante pasosdeanimalgrande.com que como no es atendida su demanda de protección, eso implica que el Mecanismo no existe y por lo tanto deben autoprotegerse , “no quiero carros blindados , necesitamos una protección comunitaria colectiva, deben protegerme a mí y a mi pueblo”.
Sigue órdenes ?
Cuestionó que esta instancia se ha convertido en otro elefante blanco que responde a los intereses de un partido político, “lo que le manda el presidente de la República, eso es lo que hace, por eso no sirve para ningún carajo”.
Al consultarle de dónde vendrían las amenazas dijo que era el crimen organizado que quiere volver a construir una pista clandestina con la complacencia del Estado “porque no ha habido ninguna instancia que diga vamos a detener esto”.
El contexto de violencia organizada también podría estarse utilizando para atacar a una defensora de derechos humanos a criterio de varias integrantes de la Asamblea de Mujeres Luchadoras, “quieren hacerle a Miriam lo mismo que hicieron con Berta Cáceres, pero no lo vamos a permitir, estamos aquí para proteger la vida de Miriam y no le tenemos miedo a este dictador”.
El gobierno del presidente Juan Orlando Hernández tiene una intensa campaña para demostrar que no está involucrado en el narcotráfico tal como ha salido a relucir en un memorándum difundido por el Fiscal del Distrito Sur de Nueva York, Geoffrey S. Berman.
Hernández destaca en los spot de televisión la “lucha intensa” que ha tenido para desmantelar bandas de narcotraficantes, decomiso de grandes toneladas de droga y destrucción de pistas clandestinas, pero el caso de Vallecito, la comunidad donde vive Miriam Miranda, deja en evidencia que se trata nada más de una campaña mediática, sin acciones contundentes, y que el crimen organizado y el narcotráfico tienen un terreno fértil para seguir operando.