Es increíble que la rectora diga que está por el dialogo, monólogo o coloquio presidencial para fortalecer la democracia y sea una déspota en la pequeña república universitaria, en negar elecciones estudiantiles; violando con este proceder uno de los elementales derechos humanos, el de elegir y ser electo.

Como es posible que alguien intolerante a la critica estudiantil, se ofrezca a mediar en asuntos politiqueros de un gobernante sátrapa y corrupto como el que ella trata de defender, su política corroída de robo de los fondos del seguro social. Cargando sobre su conciencia y la demás de sus más cercanas y cercanos colaboradores avaladores de del robo y de la muerte.

En la administración Catellanos pesan muertes de compañeras y compañeros  sindicalistas, quienes enfermaron gravemente como consecuencia de la constante represión cuando  Castellanos los despidió  por el solo hecho de ser sindicalistas y defender sus derechos laborales y a quien no bastándole esto,despojó  la personalidad del sindicato a su organización.

Como es posible que, una autoridad  universitaria, como lo es el ser la rectora de la casa  del saber y del debate de cátedra y estudiantil, sea intolerante al libre juego de las ideas y de los reclamos de las y los estudiantes, pretenda aportar ideas conciliatorias, por el solo hecho de arrastrase ante su financiador, el gobernante de turno.Qué ideas pluralistas y pacifistas podrá aportar si es enemiga del libre juego del pensar de todo aquel, sea trabajador o estudiante que le contradiga su absolutismo suciológico.

Señora Julieta Castellanos, si acepta una recomendación de parte de este espacio, le decimos que, primero arregle y sea democrática en la UNAH, una institución que le cuesta y nos cuesta a nosotros y nosotras como pueblo, con nuestros impuestos sostenemos sus costosos salarios ( y del resto de las autoridades).Si cumple con este principio de democratización en la toma de decisiones en nuestra autónoma  puede hablar de diálogo o monólogo social nacionalista. De lo contrario  es ni más ni menos albardas sobre aparejo.