La labor por los derechos humanos está protegida por la Declaración de Defensores de derechos humanos donde señala que los Estados deben facilitar esa tarea. Honduras es considerado uno de los países con más violencia contra los defensores y defensoras de derechos humanos.

En los últimos meses se han incrementado los ataques contra este importante sector del país, el más cruento fueron las torturas aplicadas a cuatro defensores y defensoras de derechos humanos que ejercían su labor en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, UNAH, el pasado 08 de septiembre de 2017. Policías auspiciados por altos mandos procedieron a sacar por la fuerza a los afectados y les rociaron gas pimienta, al tiempo que algunos fueron golpeados y posteriormente capturados para acusarlos de encubrimiento y atentado contra la seguridad interior del Estado de Honduras. Aún no hay castigo para los responsables.

En el silencio de los pasillos de Toncontín , cuando ya nadie mira y los defensores y defensoras están solas, los agentes de inteligencia inician el hostigamiento, las barreras prohibitivas evitan que hayan testigos de estos hechos y la inteligencia están con sus manos libres. 

Aunque ya van varias denuncias las autoridades no toman cartas en el asunto. La Fiscalía de Derechos Humanos que debería iniciar acciones para detener esta arbitrariedad se ha llamado al silencio. 

El presidente Juan Orlando Hernández es quien está en la línea de mand0  sobre este cuerpo de inteligencia. El mandatario en muchas ocasiones ha señalado que los defensores de derechos humanos levantan campañas de desprestigio contra su gobierno, por el solo hecho de que hablan en foros internacionales sobre la realidad de las violaciones a los derechos fundamentales de la ciudadanía.

Utilización del narcotráfico como excusa

El 15 de octubre 2017 cuando el el Psicólogo Mario Zavala, Presidente de la Junta Directiva del Centro de Prevención, Tratamiento y Rehabilitación de las Victimas de la Tortura y sus Familiares (CPTRT), previo al abordaje de su vuelo con dirección hacia Europa, fue intimidado por un supuesto agente contra el narcotráfico quien lo retuvo para investigación “aduciendo que era sospechoso de tráfico” y que iba a registrar todo.

El 02 de marzo pasado Hedme Castro, Directora de ACI-Participa fue llamada para registrar minuciosamente su maleta y además para interrogarla hacia dónde iba y con quiénes se reuniría en Ginebra, Suiza, lugar de su destino. Meses antes otro funcionario de la organización también sufrió  intimidaciones e interrogatorios exhaustivos  en el mismo aeropuerto de Toncontín por agentes de La Dirección de Investigación e Inteligencia del Estado.

Con quiénes te vas a reunir?

En un comunicado público el CPTRT describió la forma de intimidación de que fue víctima el presidente de esa organización, a continuación el detalle:

 “Cuando se intimida, tortura o se producen tratos crueles inhumanos y degradantes a un individuo y si esa persona es defensor o defensora de los derechos humanos y del ambiente, estamos ante un acto colectivo de violación de los derechos humanos, componente importante de una guerra psicológica de un Estado que tiene una póntica criminal punitiva y persecutoria que se pone en mayor evidencia a pocos días de las elecciones presidenciales. Se trata de un Estado Policial Militar en cuyo rostro enmascarado están ausentes: la justicia social, el respeto de los derechos ambientales, humanos y la defensa de la dignidad histórica de los pueblos

El 15 de octubre 2017 cuando el Lic. Psicólogo Mario Zavala, Presidente de la Junta Directiva del Centro de Prevención, Tratamiento y Rehabilitación de las Victimas de la Tortura y sus Familiares (CPTRT), previo al abordaje de su vuelo con dirección hacia Europa, fue intimidado por un supuesto agente contra el narcotráfico quien lo retuvo para investigación “aduciendo que era sospechoso de tráfico” y que iba a registrar todo. “Después de llevarme aparte procedió a hacerme preguntas para intimidarme con vos fuerte e insistir qué amigos tenía, a que se debía mi viaje. Procedió a registrar mi maleta y a decirme que sacara todo el dinero. Saqué lo que llevaba y me insistió que todo el dinero. Cuándo logré identificar su placa, el agente de nombre José Luis, suavizo su vos y dijo que era algo de rutina”.

Con voz imperativa me dijo: “¡Con quienes te vas a reunir!”: a lo cual respondí: “Con los eurodiputados, con organizaciones de derechos humanos en Ginebra, Bruselas y Holanda. Después de hacer el control migratorio me dijo que tenía la capacidad de no hacerme abordar el vuelo, porque era sospechoso cuando le dije que llevaba años luchando en derechos humanos, sin embargo me trataba como un delincuente”. Luego me dijo: “Es algo que pasa en cualquier aeropuerto”. Finalmente logre abordar
el vuelo.

Hace tres semanas el Director Ejecutivo del CPTRT, el que suscribe esta denuncia, recibió mensajes intimidatorios de amenazas de ser asesinado a lo cual se suma la tortura que sufrieron defensores y defensoras de los derechos humanos solidarios con las victimas de la criminalización de la protesta estudiantil por las autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).

Presentamos esta denuncia en plano nacional e internacional y estamos sumamente preocupados por lo que pueda pasar a Mario Zavala o a cualesquiera de los defensores o defensoras de los derechos humanos y del ambiente porque se vive en Honduras con una tasa impunidad mayor del 90%.

Demandamos la solidaridad nacional e internacional de las organizaciones de derechos humanos y defensa del ambiente con Mario Zavala y el personal del CPTRT y exigimos del gobierno de la República de Honduras se respeten los derechos humanos.

Juan Almendares
Director Ejecutivo del CPTRT