Velásquez, líder estudiantil y cursante de la carrera de Matemáticas, fue acusado por las autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), por el delito de usurpación del edificio administrativo por parte de un grupo de universitarios el 28 de julio anterior luego de una protesta.
Además es miembro del Movimiento Amplio Universitario (MAU), organización estudiantil que ha sido atacada directamente por parte de quienes rectoran el alma mater. La sede de esta organización estudiantil fue asaltada por las autoridades universitarias que sacaron equipos de sonido, mantas e información privada de los militantes del MAU.
Las medidas aplicadas al estudiante fueron las de presentarse al Juzgado a firmar una vez por semana los días jueves y no acercarse a tres testigos que presentó la universidad.
La audiencia se realizó luego de su tercera reprogramación. Se llevó a cabo después de esperar a que un juez lograra desarrollar la misma, dado que la jueza que conoce la causa, Suyapa Matute, continúa con excusa médica.
El estudiante se quejó por esta situación en la que además se tuvo que ir a solicitar la presencia a un secretario ajeno a la sala, para así poder desarrollar la audiencia prevista. “Existe una inoperancia de parte de los que imparten justicia en nuestro país, en este caso si ustedes entran solo van a encontrar a uno o dos jueces haciéndose cargo de todo”.
Enfatizó que a pesar de la ola de criminalización dentro de la máxima casa de estudios contra opositores a la actual administración que dirige la rectora Julieta Castellanos, se ha sometido en todo momento a la justicia ya que demostrarán hasta el final su inocencia.
“Parece que ser joven y ser estudiante que defiende sus derechos es un delito en nuestro país” denunció Velásquez.
Estudiantes se enfrentan a un poder judicial descoordinado
Más allá del desarrollo de la audiencia, lo que sobresalió fue la falta de jueces y de sus respectivos secretarios, para que cubrieran las audiencias programadas para este miércoles.
La abogada de la Iniciativa “Periodismo y Democracia”, Kenia Oliva, quien es la representante legal de Velásque, explicó que el desarrollo de la audiencia inicial se reprogramó por cuarta vez para el 10 de noviembre, porque la jueza que conoce del caso goza de permiso por asuntos familiares.
“Lo curioso es que estaba programada la audiencia pero no había juez. Llegó una jueza prácticamente a enterarse del caso y se ofreció a llevar la audiencia pero luego no había secretario, entonces produjo otra dilación este día” detalló.
Oliva cuestionó el hecho de que no exista coordinación a la hora de que un juez esté ausente y que no haya quien lo sustituya, dejando en evidencia el funcionamiento de los operadores de justicia en los juzgados, “se deja en evidencia que el Poder Judicial no tiene los recursos para que los jueces puedan resolver a tiempo sus audiencias”.
La reprogramación de la audiencia de Josué Armando Velásquez se suma al recurso de apelación presentado contra el auto de formal procesamiento contra Moisés Cáceres, Sergio Ulloa y Cesario Padilla, jóvenes universitarios acusados tambien por las autoridades de la UNAH, por el delito de usurpación de espacios públicos luego de las acciones de protesta en contra de un paquete de reformas a la tabla de Unidades Valorativas (UV) realizadas en el mes de julio de este año, en el marco de una estigmatización a la protesta pacífica y la violación constante a la libertad de expresión que se pasea por los pasillos universitarios.