En septiembre de este año esa organización internacional de derechos humanos solicitó una reunión al Hernández pero no obtuvo respuesta. El 01 de ese mismo mes AI presentó el Informe “Américas: "Defendemos la tierra con nuestra sangre": Personas defensoras del territorio y del ambiente en Honduras y Guatemala”, donde destaca las amenazas, asesinatos y otras acciones violentas contra defensores y defensoras de derechos humanos.
Es muy probable que el mandatario Hernández no se sintió cómodo reunirse con una organización internacional que traía muchas interrogantes de la situación de derechos humanos en Honduras la cual es cada vez más crítica.
Este 14 de octubre AI presentó el Informe “¿Hogar dulce hogar? El papel de Honduras, Guatemala y El Salvador en la creciente crisis de refugiados”, con la presencia del Secretario General de esta entidad , Salil Shetty, y aunque hubo otra vez la solicitud de reunión con el presidente Hernández y que era al más alto nivel, éste se hizo el desentendido y no le recibió.
La crisis de la situación de los derechos humanos en Honduras, el deplorable papel jugado por Honduras en cuanto al tema de refugiados, los ataques contras defensores y defensoras de derechos humanos; la reformas letales al Código Penal que violentan derechos fundamentales de la población.
Se suma la impunidad en el caso del crimen contra Bertha Cáceres y el supuesto roblo del expediente del caso, así como la situación de violencia contra las mujeres, entre otros, es seguro que hubieran sido las principales interrogantes de AI, pero se quedaron en el tintero ante un mandatario que fue displicente, tuvo miedo , no le importa qué piense el mundo , o prevaleció la soberbia.
Según una nota de prensa de Amnistía Internacional emitida el 11 de octubre pasado, tres días antes de la llegada de Shetty al país, “La organización ha solicitado una reunión con el Presidente Juan Orlando Hernández para intercambiar puntos de preocupación y recomendaciones claves para atender la crisis. Aún se encuentran a la espera de la confirmación de la audiencia. La respuesta sin duda será una señal del compromiso real del Presidente Hernández y su gobierno con los derechos humano”.
Agregó que “La crisis de derechos humanos en Honduras se deteriora a un ritmo escalofriante. Desde el aumento de los asesinatos de activistas de derechos humanos hasta la falta de protección que las autoridades brindan a las víctimas de violencia que no ven más opción que huir del país, estamos ante la presencia de una situación que requiere respuestas inmediatas”.
Con esperanza AI dijo que “Esperamos que el Presidente Juan Orlando Hernández se reúna con nosotros para conversar sobre los enormes desafíos que enfrenta Honduras y así demostrar que el compromiso que dice tener con los derechos humanos es más que meras palabras”, pero el esfuerzo fue frustrado por la displicencia.