En el marco de la actual crisis de salud el presidente Juan Orlando Hernández aprobó junto al Consejo Nacional de Defensa y Seguridad la suspensión varias garantías constitucionales a través del Decreto Ejecutivo PCM 21-2020.

Sin embargo, a más de 15 días de esta disposición las personas vulnerables son los más afectados ante la realidad nacional y quienes velan por el respeto de los derechos fundamentales que han sido excluidos por el Estado ya que no se les tomó en cuenta para salvaguardar que puedan desplazarse hasta los lugares donde hay violaciones de derechos humanos.

Carlos del Cid, Coordinador de Acción Ecuménica por los Derechos Humanos, AEDH, en una entrevista a pasosdeanimalgrande.com ha dicho que “la cantidad de violaciones a los derechos humanos que se han dado en este período del coronavirus no es dato muy fácil de decir “. Asimismo el defensor ha mencionado que sí existe un aumento en los actos represivos de la policía que van en contra de los derechos humanos.

También denunció que el Estado ha negado un salvoconducto para poder estar en las calles, impidiendo a los defensores y defensoras poder verificar si la policía está teniendo un comportamiento irregular frente a la población que demanda libertad para movilizarse por medio de la emergencia.

Asimismo mencionó que las personas al no tener la presencia de las y los defensores envían grabaciones sobre los actos que vulneran sus derechos por parte de la Policía Militar, Policía Nacional y el ejército.

En cuanto a los casos que más se repiten conforme a la violación de los derechos humanos en la situación actual, Carlos del Cid, manifestó que por parte de los entes armados del Estado hondureño son las represiones en las tomas de calles o carreteras, en las cuales la población hace exigencia de alimentación ya que las familias de escasos recursos se ven obligadas a salir a protestar porque muchas de ellas viven del día a día y es su único recurso de sobrevivencia.

Sin importar el por qué de estas acciones, según el defensor, la policía llega hasta los lugares de “forma abrupta y en un abuso de autoridad como también del uso proporcional de la fuerza, se presenta sin dar aviso lanzando bombas lacrimógenas, balas de goma y en algunos sectores de han registrado disparos de proyectiles con los cuales han resultado personas heridas teniendo que ser trasladas a los hospitales que no les atienden de la debida forma a consecuencia de la crisis, argumentó.

No obstante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH y su Relatoría Especial sobre Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales, REDESCA, han exhortado a los Estados y a las instituciones de derechos humanos a garantizar el acceso a los mecanismos de denuncia y protección frente a posibles limitaciones indebidas o violaciones de derechos derivadas de las medidas adoptadas frente a la actual situación.

Las distintas dependencias del Estado no se han pronunciado en cuanto a los actos violatorios en contra de la población que ha sido víctima de represiones por ejercer su derecho a la protesta y han denunciado el precario estado en el que se encuentran frente a la situación de vulnerabilidad que enfrentan.