Ese documento es una respuesta a un posicionamiento que las mujeres de dicha organización publicaron en el marco de la semana santa para hacer propuestas en relación a la problemática del aborto, que fue difundido en medios de comunicación con el título “Mujeres de Fe:  En tiempos de Cuaresma y Semana Santa  profesamos la Misericordia no la condena”.

El documento sacado de la manga de la camisa de la diputada Bendaña no tiene ni firma ni sello de Rodríguez, pero ha sido publicado en todos los medios corporativos sin que el Cardenal lo haya desmentido, lo que deja establecido que se trata de una posición de la jerarquía católica.

En el mismo se califica a la organización “Ecuménicas por el Derecho a Decidir” como “impulsadoras de una cultura de muerte” y las compara con Satanás, en relación al aborto.

Tanto las mujeres aglutinadas en Ecuménicas por el Derechos a decidir como las plataformas Somos Muchas, 25 de Noviembre, entre otras, han señalado que el Congreso  Nacional debe aprobar el aborto en estas tres circunstancias: a. Cuando el embarazo es producto de una violación sexual o de un incesto b. Cuando pone en grave riesgo la salud y la vida de la mujer embarazada  y c. Cuando existen malformaciones congénitas incompatibles con la vida.

Cada vez que las mujeres organizaciones proponen la discusión de este tema se activan las iglesias fundamentalistas que presionan para que no se hable de éste, a pesar que es una problemática grave en Honduras.

Solo en los meses de Enero y Febrero de este año se han registrado en el hospital “Mario Catarino Rivas” más de 200 niñas de 10 a 14  años con “maternidad forzada fueron  obligadas a parir”, lo que en cualquier lugar del mundo es una tortura y está reconocido por la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, adujó Ana Ruth García, de las Ecuménicas por el Derechos a Decidir.

 Este es el comunicado que enfureció a la jerarquía católica que en respuesta insultó a las Ecuménicas por el Derecho a Decidir

El ataque es dirigido a mujeres de fe convencidas de que es necesario la defensa de los derechos sexuales y reproductivos de niñas y mujeres, continuó la defensora.

Reputó la reacción como violenta, porque es un fuerte ataque con el ánimo de denigrar sus posturas en relación a este tema e incluso “nos compara con Satanás, en el momento que cita el versículo de la biblia en donde Jesús fue tentado por  el diablo en el desierto”.

“Nosotras no somos mujeres que apedreamos a otras, sino que hemos decidido desde nuestra fe acompañarlas”, añadió que se demostró una clara injerencia del clero hondureño, ya que provocó que se parara la discusión.

Mano oscura

Fue de la mano de la Coordinadora de la Comisión de Asuntos de Género del Legislativo, Yadira Bendaña, que se entregó la postura religiosa, ella se tomó la molestia de sacar fotocopias para distribuirlas. Lo que le llama la atención a García es que la misiva no tiene la firma del Cardenal.

En este sentido manifestó que existen dos posibles escenarios del origen del comunicado: uno que sucedió lo mismo que la falsificación de la firma del presidente Manuel Zelaya en la supuesta renuncia el día en que lo derrocaron con un golpe de Estado y la segunda es que no quisieron estampar el sello para no causar polémica de injerencia directa de la Iglesia Católica en asuntos que competen al Estado laico que debe respetarse en el país.

Ataques

Para Gilda Rivera, directora del Centro de Derechos de  Mujeres,(CDM),  el que la Iglesia Católica se haya pronunciado de esa manera atenta contra los derechos de las mujeres, refiriéndose a los comunicados emitidos en contra de la supuesta aprobación del aborto terapéutico.

Este tipo de interrupción del embarazo por causales se está exigiendo desde la plataforma “Somos Muchas” de la que las Ecuménicas son miembras, pero que el clero está atacando a través de su influencia en la aprobación del nuevo Código Penal, “acusándonos a nosotras como asesinas”, aseveró Rivera.

La defensora señaló que son las instrucciones de las iglesias, pero la católica “juega un rol muy importante en la promoción del odio hacia las mujeres”.

Opus Dei en acción

Una de las personas reconocidas como activista de la organización Pro-Vida es la diputada Yadira Bendaña, quien detuvo la sesión para que “se hicieran presentes las partes involucradas” como la Iglesia Católica, la Confraternidad Evangélica y a los grupos que dirigen el Opus Dei; y que “nos solo son ellos los implicados”, aseguró García.

“En todo caso a quienes deben preguntarnos es a las mujeres porque somos las que nos embarazamos, las que sufrimos las preeclampsias, los abusos, los estupros y las violaciones sexuales”, reclamó.

 Agregó que lo que hace el fundamentalismo religioso son actos condenables y deplorables y que el Estado no les presenta ninguna opción de vida para la salud de las mujeres, pero sí le hace caso a Pro-Vida que argumenta que “deben obligar a parir a la niña y luego dar  en adopción ”.

En contraste las Ecuménicas opinaron que “las niñas no son objetos sexuales de reproducción sino seres humanas valiosas ante los ojos de Dios y la humanidad”.

Maternidad obligatoria

El Comité contra la Tortura (CAT) de Naciones Unidas, que es el órgano de aplicación y el intérprete más autorizado de la Convención contra la Tortura de 1984, ha estipulado que los Estados que tienen una prohibición absoluta del aborto en cualquier circunstancia exponen a mujeres y niñas a la situación de ser humilladas y tratadas con crueldad.

La maternidad forzada es una de las formas de misoginia, de acuerdo al cálculo de la ONU la mortalidad materna mata a unas 600 mil mujeres al año y solo el uno por ciento en los países desarrollados lo que indica que no son naturales y que las muertes son inevitables.

Sincronización

A una hora de que la legisladora Bendaña mostrara el comunicado eclesiástico en el  Congreso Nacional , se activaron las filas de las organizaciones de Pro-Vida emitiendo el suyo.

En uno de sus párrafos expresa que “los grupos pro aborto y organizaciones internacionales presionen a nuestras diputadas y diputados para aprobar el aborto”.

Las recomendaciones del Alto Comisionado sobre el aborto en el nuevo Código Penal

La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos en Honduras, en  recomendaciones enviadas en agosto de 2016  a los tomadores de decisiones sobre el nuevo Código Penal ,  reiteró que los órganos internacionales de derechos humanos han calificado las leyes que penalizan  el  aborto  como  discriminatorias  y  como  un  obstáculo  para  que  las  mujeres  tengan  acceso  a  atención médica. Estos organismos también han solicitado que los Estados permitan el aborto en  ciertos casos, indicando claramente que negar el acceso al aborto a las mujeres cuando existe una  amenaza a la vida o salud de la mujer, o cuando el embarazo es el resultado de una violación o  de incesto, viola los derechos a la salud, a la privacidad y, en ciertos casos, a ser libres de tratos  crueles, inhumanos y degradantes.

Lea el comunicado supuestamente del Cardenal Aquí