La representante de la Organización Fraternal Negra de Honduras (Ofraneh), Mirian Miranda, indicó que en la elección de las nuevas autoridades del Ministerio Público no ha existido transparencia en el proceso ni se ha tomado la opinión de las organizaciones de la Sociedad Civil.

“Sobre la elección del Fiscal General y Adjunto del Ministerio Público, nosotros en primer lugar no hemos visto una transparencia, aunque han hablado de que hicieron una convocatoria a las organizaciones sociales, pero ya sabemos que las organizaciones que ellos están tomando en cuenta son las que derivan del gobierno de turno, del partido de turno, se dice que las convocaron pero esas no son las organizaciones sociales que nos representan”.

Miranda señaló que existe en las organizaciones indígenas mucha preocupación, porque debe haber independencia absoluta en el nombramiento y sobre todo de las personas que queden como Fiscal General y Adjunto, “alguien que pueda responder a una crisis que tenemos nosotros, como es el tema de la aplicación de justicia y el combate a la corrupción, contra la impunidad, dos temas que corroen este país, donde hay gente muy comprometida y no vemos eso nosotros como organización. Debe haber participación de la población en general y respeto al nombramiento de esos cargos ”.

Destacó que “las personas que lleguen allí, cualquiera que sean, esperamos que sean abiertos porque nosotros tenemos una experiencia nefasta ni siquiera nos reciben para presentar nuestras propuestas, para dar nuestra opinión y sobre todo que se le busquen soluciones a este tema que es el de la impunidad y la corrupción en el país”.

Proceso amañado

Por su parte el dirigente del movimiento popular, Carlos H. Reyes, afirmó que el proceso para la elección del Fiscal General y Adjunto del MP, ha resultado “amañado”.

“A nosotros nos parece que esa elección del Fiscal General al igual que la elección de la Corte Suprema de Justicia y de otras elecciones, hasta lo de las elecciones generales, todo esto está amañado”, destacó.

Para Reyes “de esto no puede salir nada que tenga esperanza el pueblo hondureño de redimirse de tanta corrupción, no tiene esperanza el pueblo hondureño de que no haya impunidad y que no se acabe con la impunidad, es una lástima, pero todo indica que va para allá el asunto”, afirmó.

Según el dirigente social, “son los mismos mecanismos y dan los mismos resultados”.

Sobre los candidatos dijo que “individualmente no tengo opinión, yo lo que veo más que nada es todo el proceso en sí, desde donde salieron esos candidatos, los que están y todo lo que viene”.

Reyes es del criterio de que todo el mecanismo está orientado a que salgan las mismas cosas, para que se siga defendiendo a toda la gente que ha cometido actos de corrupción. “Puede ser que en alguna medida se abran mecanismos que parezcan transparentes pero de nada sirve que parezcan si en el fondo el proceso no es transparente”, concluyó.

Previamente electos

Para el representante de la Coalición Contra la Impunidad, Guillermo López Lone, en el proceso no hay nada nuevo, ya que previamente estaba electo el que ocupará la titularidad del Ministerio Público.

“La eleción del Fiscal y Fiscal Adjunto lo han ido conduciendo la Junta Proponente y los grupos de poder hacia una elección de los candidatos que previamente ya habían seleccionado”.

López Lone indicó que en el proceso de elección de las autoridades del MP, “no creo que van a ver sorpresas, tenemos allí como fiscal general y fiscal adjunto a las personas y profesionales que en este momento son los más cercanos a los grupos de poder y del actual gobernante”.

El representante de la Coalición dijo que “se oye hablar que el próximo fiscal general será Abraham Alvarenga, una persona que ha jugado un papel importante en el régimen desde la Procuraduría General de la República, que seguramente esas son sus credenciales, su actitud obediente y sumisa frente al actual gobernante para poder llegar a ser Fiscal General de la República”.

En cuanto a quién podría ser el Fiscal Adjunto, López Lone afirmó que “todavía no hay un panorama claro, aunque le estoy hablando de lo que se oye decir en los medios de comunicación y no sé quién podría ser, pero en el otro plano, el Fiscal General, todo apunta a que será ese señor antes mencionado, por su cercanía al régimen”.

Agregó que “luego está un proceso bastante opaco, sin ninguna transparencia, con un hermetismo y manejado tras bambalinas por la Junta de Proponentes, quienes finalmente han hecho con las calificaciones lo que les ha parecido más conveniente y que de repente el fiscal Abraham Alvarenga que no se mencionaba, ha salido con una de las puntuaciones más altas, lo cual viene a evidenciar lo opaco que ha sido ese proceso de selección y de cómo la Junta de Proponentes ha venido a dar muestras de que no son instancias en las cuales se pueda confiar y se pueda tener credibilidad”.

Como única opción dijo López Lone “lo que se puede esperar si llega esta persona es a que la ciudadanía responda críticamente en el sentido de que nuevamente las autoridades han asegurado el control del Ministerio Público y la acotación de toda la institucionalidad”, finalizó.

Constituye burla y un proceso falso

Por su parte el abogado Víctor Fernández, representante del Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia, (MADJ), dijo que la elección constituye una burla para el pueblo y un proceso falso.

“Varias cosas se pueden decir sobre este proceso de elección del Fiscal General y Adjunto del Ministerio Público, la primera afirmación obvia que se puede hacer es que constituyente una notoria burla para la dignidad y para la inteligencia del pueblo hondureño”.

Para Fernández el proceso de elección “constituye una vergüenza, un atropello muy notorio a la dignidad de la gente, porque es un proceso obviamente falso, obviamente arreglado, forzado, introducido a como dé lugar en los medios de comunicación tradicionales del país por los voceros históricos de la corrupción en el país y son los que más hablan en sentido favorable de un proceso tan vergonzoso como éste”.

“Una segunda afirmación que puede hacerse obviamente, la sociedad hondureña, por eso, porque entiende que ha sido burlada, atropelllada en su dignidad, tiene una notoria frustración sobre lo que está pasando en ese proceso y eso se expresa en la apatía popular, en una especie de resignación, por el convencimiento de que ese proceso de lejos se nota que es una farsa”, agregó.

Indicó que “el proceso también ratifica lo hondo de la pudredumbre en la que vive o nos han sometido, la élite económica corrupta de este país, que ha tenido la perversa habilidad de hacerse con todo el control de la vida política e institucional”.

Destacó que “ya no esperamos sorpresas, es decir, los corruptos tomaron control del país, los corruptos vinculados con el crimen organizado en todas sus expresiones, incluso la corrupción política, la corrupción electoral y todas las modalidades de corrupción”.

Fernandez manifestó que “este proceso de elección de una figura tan importante en la sociedad hondureña y en cualquier sociedad como el Fiscal General, retrata exactamente eso, el nivel de la mayúscula perversidad de esta reducida élite económica del país, que insisto, ha controlado todos los actores institucionales en el Estado y en el Gobierno de Honduras”.

A su juicio “refleja también una sociedad civil como se suele llamar a esta otra pequeña élite, también corrupta, es decir, aval de la gran corrupción en el país, con un discurso en apariencia de combate a la corrupción.

“Pero fácilmente han desconocido que muchos de los candidatos de los que están postulándose y que están siendo electos y que tienen prohibiciones legales para ser siquiera postulantes al cargo de fiscal general”, subrayó.

Para Fernández los voceros en este proceso son impuestos denominándoles sociedad civil la cual está financiada por la Embajada de los Estados Unidos, fundamentalmente y por estos sectores del conservadurismo mundial.

Según el entrevistado esos voceros avalan a los candidatos o candidatas de quienes dicen que tienen perfiles favorables y que han tenido misiones aceptables en otros cargos “como el Procurador General de la República, que parece que es quien se adelanta con buen puntaje en el falso proceso de selección y que seguramente tendrá el favor en el Congreso Nacional”, acotó.

Desde su perspectiva “un actor a observar y a tenerlo en cuenta es esta vergonzosa sociedad civil, partícipe de la corrupción y del remedo y vulgar funcionamiento de la institucionalidad hondureña, merece esa crítica y ese calificativo y que no se disfracen de otra cosa en casos particulares o en otro tipo de comportamientos porque ellos están contribuyendo en configurar que en este tipo de institucionalidad con funcionarios comprometidos a fondo con la corrupción en el país”.

Para el representante del MADJ, “es una pena que ese Ministerio Público nos cueste tanto y que tenga un importante número de trabajadores y trabajadoras, que tenga varios espacios organizativos, entre ellos la Asociación de Fiscales de Honduras que tiene como uno de sus mandatos o fines la defensa del Estado de Derecho, pero no logramos escuchar una voz disidente a lo interno del Ministerio Público que denuncie o que reclame esta notoria colusión de los actores del crimen y la corrupción y de la política corrupta de este país, todos los capos se vinculan en esto pero los trabajadores del Ministerio Público, la Asociación de Fiscales, la Asociación de Empleados, no tienen una voz, pareciera de que son parte de la misma estructura”.

Fernández apuntó que “desde mi condición de ciudadano organizado y que lucha por la población en el Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia, yo quisiera recordar a todo los actores, incluyendo a la gente más genuina en estos procesos, primero señalar que sólo estamos acudiendo a este tipo de proceso cuando viene la elección de las principales autoridadesy después de eso nosotros nos desconectamos del proceso de seguimiento.

También hay desconexión de cuestionamiento y de sistematización de todo el mecanismo de corrupción por el cual funciona el Ministerio Público, es decir, hay que recordar a estos actores, que no solo es importante el tema del Fiscal General cuando se elige sino todo el funcionamiento de todo su periodo de gestión.

Criticó que en el “otro sector de Sociedad Civil” que ejecuta proyectos y desarrolla foros una vez pasa la elección del titular del Ministerio Público, pasan a otra agenda y la gestión desastrosa de los fiscales generales, pierde el foco de los cuestionamientos que debería tener.

Por lo que recomendó desarrollar presión permanente, vigilar si hay denuncias rigorozas desde una fiscalía local o desde una fiscalía regional, hasta la fiscalía general, vinculada con todo el sistema de administración de justicia, “llámese Corte Suprema de Justicia, llámese Policía Nacional, que tengamos esos mecanismos de presión permanente, frente a las nefastas ejecutorias de estas instituciones en todos los momentos”.

Fernández es de la opinión que si se logra encontrar un mecanismo de participación ciudadana que permita revertir determinados comportamientos del Ministerio Público, del sistema de administración de justicia desde un proceso organizativo que conduzca a la propuesta para darle vuelta al fracaso estructural de la institucionalidad que no beneficia a las grandes mayorías sino que es una institucionalidad para “la élite corrupta y violenta de este país”, finalizó Fernández.