En declaraciones a pasosdeanimalgrande.com Briceño denunció que el hecho comenzó con una llamada telefónica a su casa  por parte de un abogado de nombre Amílcar, en donde le notificaron la captura de un individuo el cual portaba una identificación con su nombre y pidiéndole que se presentara para reclamarla.

“ Me dijeron que me presentara aquí a la sede de la DNIC en la Cañada porque yo supuestamente había interpuesto una denuncia por haber perdido documentos en el año 2012, cosa que me extrañó porque no he perdido mi identidad y nunca he puesto una denuncia por eso salvo por mi licencia de conducir” explicó Briceño.

Al presentarse al lugar, acompañado con miembros del Centro de Promoción e Investigación de los Derechos Humanos en Honduras (CIPRODEH) y de otros integrantes de “Oposición Indignada” e inmediatamente llamaron a un superior y posteriormente bajaron dos miembros armados de este ente de investigación  que  lo condujeron a una sala con intención de interrogarlo.

El joven se extrañó porque al momento de dirigirse a la sala, solo le permitieron el acceso a él y al representante de CIPRODEH, Dennis Muñoz y aparecieron dentro cuatro agentes de investigación,  lo que le disgustó a Briceño. Posteriormente lo obligaron a que permaneciera sin la presencia del defensor de derechos humanos.

“Me extrañó esta acción y no me gustó e inmediatamente cuando veo que Dennis se levanta yo le digo que no me siento incómodo que por qué se sale alguien que defiende mis derechos humanos y me le pego a él, que siento que me van a hacer algo y me gritan que tiene que salir y cuatro de los agentes me agarran y me jalan hacia la sala, sacan a Dennis y me quedo solo” relató el joven.

Además agregó que luego de no haberle comprobado el hecho de la denuncia por la retención de sus documentos,le quisieron reactivar una orden de captura por un delito que fue saldado en el año 2013.

 “Con el tipo de trato tan agresivo que recibí se comprueba que es una flagrante intimidación y una persecución política… yo no soy un corrupto y por eso me presenté voluntariamente al lugar por esta denuncia, soy figura pública y estoy expuesto a este tipo de acciones en mi contra” aseveró.

Posteriormente y luego de que sus abogados se presentaran a las instalaciones de la DNIC, remitieron al líder de los indignados hacia los juzgados de letras de lo criminal en el barrio La Granja para aclarar lo sucedido y recobrar su libertad. 

Indignado por indignado, ¿a quién le toca ahora?

Briceño fue agredido el sábado anterior horas antes de abandonar la huelga de hambre que inició junto a Ariel Varela más de una semana  en  las cercanías de Casa Presidencial. Al momento de brindar declaraciones a los medios, no le permitieron el ingreso al interior del cerco policial militar en donde se encontraba instalado.

Un oficial de apellido Medina le agredió físicamente al empujarle hacia la valla metálica, provocándole lesiones en su brazo y posteriormente sufrir un desmayo producto de la debilidad que presenta el hecho de permanecer privado de los alimentos por más de cinco días.

El pasado domingo 28 de junio, Varela fue interceptado por una patrulla policial enfrente del edificio de un medio corporativo de comunicación con el objetivo de capturarle y retenerle su teléfono celular ya que posee una grabación de un automóvil que le estaba dando seguimiento desde su retiro de la huelga.

Durante la huelga de hambre tanto estos jóvenes como los que actualmente continúan, han sido objeto de intimidación por parte de los elementos armados que se apostan en la zona así como con la presencia de francotiradores en los edificios que se encuentran alrededor del lugar.