La semana que recién culmina es una de mayor violencia contra personas que registra en Honduras. Unas 32 perdieron la vida debido por dos causas, la violencia extrema y la represión estatal por los entes policiales. Los resultados son seis muertos y 80 heridos, lo que denota un alto índice de violencia ocasionado por los cuerpos de seguridad del Gobierno.
Violencia extrema contra estudiantes menores de edad a quienes Nelson Cálix, Director del Instituto Técnico Honduras, ITH, acusa de posiblemente tener bombas lacrimógenas, portar armas y obstruir la educación, es solo parte del estigma y criminalización de la protesta en ese colegio.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, condenó este 03 de julio de 2019, los hechos de violencia donde ha habido la afectación a la vida e integridad de las personas; e insta al Estado de Honduras a adoptar las medidas necesarias para que sean investigados de manera pronta, exhaustiva y diligente, estableciendo las responsabilidades materiales e intelectuales y sancionando a los responsables.
Un documento en proceso de construcción para contar la fuerza represiva utilizada por el Gobierno de Juan Orlando Hernández, destaca la militarización de que son objeto las protestas pacíficas y las consecuencias hacia manifestantes que son víctimas de represión en los últimos meses en Honduras.
La violencia que en las últimas semanas ha intensificado el gobierno contra los manifestantes que claman mejores condiciones de vida en todo el territorio nacional, pone en alerta a los organismos internacionales, que sin respuesta alguna, les han solicitado a las autoridades contener los ataques mortíferos contra la población.