Martes, Oct 2024

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Foto: IM-Defensoras

Entre 2012 y 2023, en la IM-Defensoras hemos documentado 35,077 agresiones contra 8,926 defensoras y 956 organizaciones. En el mismo período, 200 defensoras fueron asesinadas y otras 228 sobrevivieron a intentos de asesinato. El 45% de los ataques son perpetrados por autoridades del Estado a través de cuerpos policiales, autoridades de distinto nivel y fuerzas militares, según un informe de  la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos (IM-Defensoras).

Lejos de tratarse de Estados fallidos los hallazgos demuestran que autoridades y poderes fácticos actúan de la mano para reprimir a quienes ponen en riesgo sus intereses y mantener un sistema de privilegios, acumulación por desposesión y depredación territorial.     

El informe visibiliza y analiza, desde una perspectiva feminista e interseccional, las violencias que enfrentamos las defensoras de derechos humanos en El Salvador, Honduras, México y Nicaragua a partir de lo documentado por más de 10 años a través del sistema de Registro Mesoamericano de Agresiones a Defensoras, de acuerdo a un resumen divulgado previo a una publicación más extendida.

El informe da cuenta de cómo en la mayoría de estas agresiones los Estados están actuando para proteger los intereses de poderes fácticos, como empresas extractivas, crimen organizado o grupos fundamentalistas y anti-derechos, entre otros. El 23 por ciento de las agresiones se produjo contra quienes defienden el derecho a la verdad, la justicia y la reparación

Hostigamientos, desprestigio, amenazas o criminalización

Honduras, donde especialmente a partir del asesinato de Berta Cáceres en 2016 no han dejado de incrementarse los ataques contra las comunidades garífunas, lencas y campesinas que defienden sus territorios y cosmovisiones, describe IM-Defensoras.

Algunas de las agresiones documentadas con más frecuencia; suelen ser reiteradas y escalar hacia violencia física y psicológica, llegando hasta expresiones más brutales como la prisión, el desplazamiento forzado o el asesinato.

Las defensoras de derechos humanos somos agredidas por defender derechos y por combatir con nuestras luchas la desigualdad de género. Se trata de violencias patriarcales que buscan lanzar un mensaje ejemplificante e inhibidor, usando estereotipos de género, insultos sexistas y violencia sexual y, en 39% de los casos, incluso atacando a personas de su entorno cercano, agrega el documento publicado este 17 de junio de 2024.

Descargue y lea resumen ejecutivo en este link

 

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